sábado, 19 de mayo de 2007

La alegría de querer



… para que nuestras manos se encontraran.

Jorge Luis Borges




no es lo mismo
un amor de este calibre
amargo
dulce
y libre
siempre viene solo
pero nunca llega solo
con ello
en toda la redondez de la Tierra
en toda la virtualidad de la Red de Redes
entre cuatro paredes
o en ninguna parte
todo florece
el parque
el reloj
el rayo láser
la hermosa sonrisa
hasta el mapa todo
sonríe
pero ¿qué he hecho yo
para merecerme esto?

como un jefe indio
que fuma la pipa de la paz
yo te fumo cien veces
al momento
a la sombra del árbol milenario
en plena naturaleza

como un héroe de folletín mexicano
yo no paro de luchar
por ti
contra el monstruo de siete cabezas

te quiero
lo mismo que si eres mi árbol gigante

me siento otro
multiple
y muy alegre
lo único que siento
es no haberlo hecho antes
pero por fin
las estrellas
brillan en el cielo
aún es pronto
para envejecer

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