martes, 27 de noviembre de 2007

De maestros y aprendices

by grace


- ...en cuanto a tí, que tienes hijos y marido
que vives en tu casa rodeada también
de arboledas y de honra, voy a decirte:
no hay muros ni cimientos que te afirmen
no hay riquezas que te atesten
no hay alianza sin fe
ni otros ojos que velen por tus sueños
no hay hijos diferentes a los de tus entrañas
no hay tesoro sin altura
ni pico mayor a la sabiduría
y "...todo lo que se puede desear,
no se compara con ella."

- Pero ¿dónde hallarla?
acaso en el revuelto fondo de los mares
o en el viscoso núcleo de la Tierra?.
He ayunado días y noches
para encontrarla entre las nubes
pero las aves señalaron el crepúsculo...
Y donde estaba la emisión más sublime
la primera luz de la mañana
tampoco la alcancé.

...


Luego te vi, te acercaste dulcemente
me enseñaste ciencia y discreción antes que oro
e inteligencia y juicio en horas muy tempranas.
Entonces comprendí, que ella habita en ti
y en la cordura.

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