sábado, 13 de mayo de 2006

Sueños de aventuras en avance

Desde mis épocas de frías tardes domingueras de Tomb Rider con mis hijos a hoy, han pasado varias versiones desde aquella trunca etapa de Venecia para Play Station. De veras me encantaba ser Lara Croft y hacer esos esfuerzos onomatopéyicos al escapar del tigre en la cueva. Era tan real que hasta sentía que me ahogaba cuando ella se sumergía a luchar con tiburones...Wow!!! cuántas emociones he compartido (y sigo =) con ellos. Si entenderé la pasión que atrapa a los niños cuando juegan al famoso y nuncabienponderado MuOnline (maldecido por los padres). Pasa que, en el juego, ellos son el héroe que muchas veces no pueden ser en la vida real o quizás sí, pero las opciones de tener alas o revivir por ejemplo, no se ven en la vida como una realidad (tampoco los padres son capaces de mostrarles lo contrario ¡je je!). Digamos, que por ser un juego se entiende desde muy temprana edad que esas alas, esas luces resplandecientes, esas espadas, esas reverencias, o la fuerza misma representan poder, pero que es sólo un juego. Falllllllllllllllllllllllso!!! tan falso como una banana de plástico!. Los niños ejercitan y ponen en práctica eso que aprenden y todo esto pasa aún sin considerar los flashbacks que incluyen de aventuras anteriores del mismo héroe...Entonces los "dueños de nuestros cerebros" logran el efecto de "la Saga sin fin", sin duda muy rentable. Efecto que hay que lograr en la realidad.
Siempre digo que los niños son los más sabios y me detengo en todo momento a aprender de ellos, porque pueden seguir la saga sin olvidar la hora de "la leche" ni desaprovechar la oportunidad de subir niveles, donde deben lidiar contra mortales enemigos a la vez que deben resolver puzzles y encrucijadas para poder cumplir con tu misión. Es como jugar en 15 tableros de ajedrez a la vez, hablar por teléfono y chatear. ¿Creen Uds que estos niños son incapaces de administrar sus vidas seccionando la realidad y la ficción?. En mi opinión ellos son genios que tienen su órbita mucho más cerca de sus expectativas y sus deseos entrañables...tanto más de lo que un mayor cree.
Fíjense esto: si tan sólo pudiéramos recordar y poner en práctica lo que soñamos, no estaríamos tan alejados de ese héroe que se entrena en campos virtuales. Podríamos adentrarnos horas en el tema de los sueños según Freud y demás yerbas, es apasionante, pero nos iríamos de tema...x que lo que importa es que muchas veces en los sueños se resuelven problemas de la vida real con la dosis de efectividad precisa y bueno sería retenerlos para linkear internamente y llevarlos a cabo. Seríamos seres satisfechos, como los niños....o mejor, como deberían ser todos los niños.
Todo esto viene de la mano de un sueño que anoche me hizo recorrer lugares inhóspitos, casi intransitables, laberintos, formidables pensamientos y miserias, claro. Escapé, sorteé obstáculos, me ví obligada a mutar para evadir a la misma muerte y al despertar, se me vino a la mente algo que se relacionaba con la muerte y los errores "no errar el guadañazo". Suena hasta profético ¿no?. Y es mejor cuando se puede seguir el hilo con sólo volver a cerrar los ojos. Es cuestión de ejercitar, como todo.
-¡¡¡¡¡¡¡¡Vamos Lara todavía!!!!!!!!!- me gritaba mi voz desde lo más hondo, despertándome de a ratos.
Julio tiene un cuento inconcluso maravilloso donde dice que el único momento de verdadera plenitud es el de los sueños, porque es un territorio generado por ese soplo, esa energía inextinguible, ese Dios que jamás duerme dentro nuestro. Es allí donde conviven los deseos, el contenido de las lágrimas y los silencios. Vale la pena ahondar y ponerlos x obra, x q son pura inspiración divina. Vale masticar, caminar, hablar x teléfono y soñar.
Digo que esos juegos que juego con y como mis hijos, son producto del sueño de una mente como la de mis hijos, como la tuya, como la mía, pero con una estrategia y técnicas varias para que se vean de un determinado modo "amigable" para el usuario. Pero hay que ver al héroe que no tiene modo de presentarse de manera "amigable", hay que saber que el poder está pulverizado y que los héroes están x todas partes. Hay que exprimir los sueños en la vida real y no ahogarse en charcos. Hay que conservar al niño a como de lugar, para crecer y seguir soñando y obrando en consecuencia.
Y para hablar de 1000 temas a la vez (como dice Jab), les dejo 1 poesía de Tríptico del Amor
El capítulo se llama Sueños, lágrimas y silencio, y comienza asi:

Dormir amor
no es estar muerto.
Te veo soñándome
con los ojos entreabiertos
bebiendo la distancia
y en el ceño : mi figura
como el fuego y el viento.

Dormir amor
no es estar muerto.
Muere el que mata al puro sueño
al extensible océano
al brillo de los ojos
y al talento.

Duermen los días lluviosos de febrero
duerme el aire espeso
duermen los besos
y la humedad
procrea sueños y sueños...
Y los sueños amor
no se aproximan a la muerte
ni a un letargo de adioses
ni a un eclipse de soles
ni a la quietud.

Duerme un sueño eterno Amor
no eludas al lecho ni a los sueños
ni al fuego avasallante de mis versos
ni al viento que sopla cálido en invierno.
Porque sólo elude el débil
se desvela
y sin remedio
muere.
"No sé si lo soñé, no sé si lo viví..."
Así comenzaba un tema de mi amigo Leo Salviani,
cuando se dedicaba a hacer rock hace varios años, claro.
Ya ves, nada viene tan traído de los pelos...
esto es una gran trenza que hay que saber peinar.
Chau!!!

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