por graciela malagrida
Con los años uno encuentra mapas
debajo de la piel
zonas que se van iluminando
por el sólo hecho
de llevar debajo
tesoros.
Quiero decir que esas áreas
demarcadas por cierta refulgencia
se vuelven llamativas a la vista del poeta
y de algunos lunáticos
que aun pretenden llenarse de oro
mirando los ojos de la gente…
Y no es esto un show de luces
no estoy echando bronces sobre un cuerpo
del que nadie va a acordarse… no no, sólo cavilo
y digo que cada cual endosa a su manera:
el ave hunde su huella en el viento
el ciego canta y describe colores inefables
el mudo pinta su voz en ventanas y puertas
que se abren
y todo se nos graba.
Alego que no es luz propia
la que se contrae como peste entre inocentes
la que crece cual hierbabuena en el desierto
la que lo pilla a uno masticando el dolor
y sin embargo
se apiada.
Con los años uno cae en la cuenta
que una lágrima lleva a la otra
y por el rodar, el rimar
y el propio peso
a la paz
a la paz de la palabra.
domingo, 17 de abril de 2011
Tez oro
Publicado por Unknown a las 03:43:00
Etiquetas: "Fotografía by Lilian Lichowski", "poesía de Graciela Malagrida"
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Bellísimo poema! Me gustaron las imagenes y la sensibilidad estética.
ResponderBorrarIsabel Furini